¿Por Qué Ayunamos?
Además de ser una gran práctica para purificar nuestro cuerpo, en Mateo 6:16-18 Jesús se refirió al ayuno como una expectativa normal para cada uno de sus discípulos. En Gálatas 5:16, el apóstol Pablo desafía a los creyentes a ser guiados por el espíritu de Dios en lugar de ser guiados por los deseos naturales de nuestro cuerpo.
¿Qué es un ayuno?
Según el diccionario, la palabra “ayuno” significa “sufrir hambre” o “abstenerse de comida o bebida”. Hay cientos de versículos de la Biblia que hablan sobre el ayuno. Medite en estos: 1 Corintios 9:27, Ester 4:16, Jonás 3:5-9. El propósito del ayuno es crear un espacio de tiempo para desarrollar la intensidad espiritual para buscar la cercanía con Dios. Por esta razón, ayunar sin oración no es una actividad bíblica.
Es importante mencionar que un verdadero ayuno implica siempre abstenerse de alimentos. Es por eso que alguien que opta por abstenerse de usar Facebook, de comprar o “dejar el chocolate” no necesariamente está ayunando. El ayuno no es un medio para manipular a Dios. Algunas personas piensan erróneamente que si ayunan entonces Dios les debe un favor. No ayunamos para forzar la mano de Dios a hacer nuestra voluntad, sino para acercarnos a él y estar más disponibles para escuchar su voz.
¿Cuál debería ser el objetivo principal de mi ayuno?
El objetivo principal del ayuno debe ser acercarse a Dios. En Amós 5:4 Dios desafía a su pueblo a "búscame y vivirás". Es bueno ayunar para peticiones urgentes de oración, pero es esencial poner nuestro corazón en buscar a Dios primero, por encima de cualquier otra búsqueda de nuestro corazón.
¿Qué tipos de ayuno hacemos en Nueva Vida?
Aunque la Biblia menciona todo tipo de ayunos, en Nueva Vida animamos a nuestros miembros a hacer un ayuno de líquidos. Para este tipo de ayuno renunciamos a todo tipo de alimentos sólidos e ingerimos únicamente líquidos como jugos, caldo y agua. También eliminamos cualquier tipo de actividad adicional que no sea esencial para nuestras responsabilidades diarias, como tomar café, ir de compras, Facebook y otras formas de entretenimiento.
¿Cómo me preparo para mi ayuno?
Disminuye tu ingesta de alimentos progresivamente deshazte de los no esenciales como cafeína, refrescos, azúcares, snacks, etc.
Vaya a comprar frutas, verduras, jugos y agua antes de su ayuno. De esa forma evitarás distracciones en las tiendas durante tu ayuno.
Libera tu calendario para hacer espacio para momentos intencionales con Dios con anticipación.
Por último, fíjate algunos objetivos claros de ayuno. ¿Cuántos días ayunarás? ¿Qué alimentos? ¿Dónde orarás? ¿Cuándo orarás?
¿Qué pasa si tengo dolencias físicas que me impiden ayunar?
Si tiene una condición médica que le impide ayunar, consulte primero con su médico. Dicho esto, también debes comprender que el ayuno te obligará a decidir entre cosas normales en tu vida, que no son esenciales, y la elección de buscar a Dios con sacrificio. Cualquiera puede dejar la cafeína, la radio de chismes, los programas de entrevistas, los juegos de computadora y la comida chatarra sin el permiso de un médico.
¿Qué pasa si mi trabajo es físicamente exigente?
Miles de cristianos a lo largo de la historia y en todo el mundo que viven bajo presiones extremas encuentran momentos para ayunar. Recuerda que Dios te invita a acercarte a Él (Santiago 4:8). Debes evaluar las exigencias de tu trabajo y buscar dar lo mejor de ti independientemente de si estás ayunando o no. Dado que todo lo que hacemos es un reflejo de la obra de Dios en nosotros, nuestro desempeño laboral es una parte esencial de nuestro testimonio personal. Por esa razón le pedimos que no ponga en peligro su vida sin pensar sin una convicción clara de Dios. Por ejemplo, puedes hacer una comida y ayunar el resto del día.